En la práctica psicológica se da una creciente importancia a los tests de diferentes tipos: cuestionarios, escalas de valoración, proyecciones, etc. Hay muchas posibilidades de evaluar la personalidad, la inteligencia, diversos rasgos y la presencia de síntomas de enfermedades mentales.
Nos hemos centrado en las pruebas que puede realizar la propia persona para conocerse mejor. Ninguno de los tests aquí presentados permite establecer un diagnóstico, ya que para ello es necesario un examen médico o psicológico especializado.
Ofrecemos un autotest de temperamento, que permite acercarse a las características heredadas de nuestra forma de ser, que representan un don. Esta prueba sigue la tipología desarrollada por Galeno en el siglo II, que es aún válida hoy en día. Sirve para desarrollar el buen potencial que se encuentra en cada temperamento.
Otro test que presentamos es un autotest de personalidad, que tiene en cuenta los 10 tipos de defectos más comunes que pueden conducir a un trastorno del modo de ser o de la personalidad. Para cada uno de ellos, se presentan elementos útiles para mejorar.
A continuación, se presenta el test de Rotter, para ver si uno tiene tendencias internalistas (pensar que todo lo que me ocurre depende mayoritariamente de mí), o externalistas (todo depende mayoritariamente de las circunstancias). Se considera una herramienta valiosa, para comprender el propio grado de responsabilidad con que se afrontan las distintas circunstancias de la vida.
Por último, se incluye un autotest de conciencia o test vocacional, para examinarnos y ver si hay coherencia en nuestra vida espiritual cristiana, representada especialmente en las bienaventuranzas.
Test de personalidad Test de Rotter Test de temperamento Autotest vocacional
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